Muchas compañías comienzan a controlar la producción con herramientas heterogéneas y sin conexión a un sistema central, pero estas fórmulas no pueden ser una solución a largo plazo para la empresa. La necesidad de partir del control de la producción y obtener un análisis de información y la respuesta al mercado de forma clara, amplia, rigurosa, integral o en detalle obliga a implantar soluciones conectadas y centralizadas como se consigue con un software ERP. A medio largo plazo, trabajar con herramientas poco adecuadas complica la capacidad de gestionar la producción y limita la capacidad de crecimiento del negocio.
Es por esto que la implantación de un ERP en casi todos los escenarios deje de ser una opción para ser una necesidad. La optimización de los procesos es esencial en la industria del metal. En el mercado del software actualmente existe una importante oferta de este tipo de programas de gestión. ¿Qué software es el más adecuado para este tipo de empresas? ¿Cuáles son las características obligadas durante el examen de un ERP? Previamente a seleccionar un ERP, una empresa debe tener saber cuáles son sus necesidades y qué aplicaciones informáticas proporcionan la solución práctica a las mismas.
La industria metalmecánica y la ingeniería industrial necesitan un sistema propio para gestionar todos los departamentos del negocio y que permita la trazabilidad de los flujos de información, independientemente de los datos que se gestionen o del proceso de producción, ya que estos elementos están relacionados entre sí. Igualmente serán necesarios programas que evolucionen con el tiempo, sean escalables y permitan a la empresa crecer sin limitarla. Un programa ERP ha de ser flexible y adaptable con facilidad respecto al crecimiento natural de un negocio.
La mejor manera de resolver este problema es implementar un software ERP orientado a la planificación y gestión de su negocio, desde la producción hasta el resto de departamentos. Pero elegir el ERP correcto puede ser una tarea compleja que supone una transformación de la empresa, de ahí que debe acertarse en la elección para cubrir las necesidades reales de la empresa y sea fácil de implementar.
Los modelos estándar solo se centran en los elementos que se encuentran, básicamente, en la mayoría de las empresas, por lo que es sencillo centrarse en la administración o la contabilidad y olvidarse de los elementos más importantes de la industria, la parte productiva. Por otra parte, es fundamental que el ERP sea lo más adaptable posible a cada tipo de negocio o gestión.
Para cubrir estas carencias es importante saber si el proveedor y su equipo especializado desarrollarán exactamente la funcionalidad que desean. ¿Los expertos en este campo han dedicado muchos años al conocimiento y la implementación en la industria? ¿Cuánto tiempo se tarda en adaptarse, cuánto cuesta finalmente esta solución y, sobre todo, podrá evolucionar junto al mismo tiempo que los negocios del sector?
Por tanto los ERP orientados a un sector como la industria del metal, deben poder abarcar todos los procesos de fabricación, planificación y control de producción, de ahí que un sistema especializado satisface todas las necesidades propias de negocios específicos.
De los ERP hay básicamente dos modelos, el modelo especializado y modelos de carácter general. El primero se desarrolla buscando cubrir todas las funciones necesarias de un sector en particular, y los segundos se ejecutan a través de plantillas estándar, genéricas.
El modelo de propósito general agrupa solo lo que se encuentra en la mayoría de los negocios, por lo que es fácil centrarse en la parte administrativa o contable, olvidando la producción, que es uno de los elementos más importantes de la industria del sector metal.
En los tipos de ERP generalistas se suelen ofrecer opciones de ajuste «personalizadas» para sus limitaciones, pero la pregunta surge a medida que desarrollamos exactamente las características que los expertos de la industria han conocido e implementado a lo largo de los años. ¿Cuánto tiempo se tarda en solucionarlos? ¿Cuánto cuesta la solución final y, lo que es fundamental, es fácil de implementar y desarrollar de forma nativa?
Un sistema de software de gestión especializado y creado por profesionales que comprenden lo que la ingeniería industrial y el sector metal necesitarán no debe plantear estas cuestiones, ya que resuelve todos los problemas y facilita la gestión, desde un punto de vista de la fabricación industrial, abarcando todas las áreas de la empresa… En resumidas cuentas, elegir un ERP específico es la mejor opción para este sector, ya que garantiza que se cubran todos los elementos esenciales y concretos en este tipo de negocios con una gestión integral bien orientada.
En definitiva, elegir un ERP específico para el sector del metal es una muy buena decisión para la gestión de este tipo de empresas, cuya la elección ha de hacerse con especial cuidado de que encaje en el modelo de negocio o se pueda adaptar fácilmente y esté preparado para el mismo.
El ERP Prax se ha desarrollado para el metal, auxiliares e ingeniería industrial, y reúne todos los procesos productivos, administrativos, comerciales, etc. en un solo sistema, sin estar limitado en usuarios o módulos. Entre algunas de sus características, integra gestión de suministros, gestión de proyectos, control de producción, planificación, subcontratación, servicios de mantenimiento y gestión de la demanda relacionada. Cubre producción, gestión de planta, trazabilidad, automatización de procesos, personal de planta bajo contrato con OT, producción de consumo de materia prima, etc.
Para implantar un sistema ERP el equipo debe comprender su negocio, como hacemos en Adeq Systems. Prax tiene detrás a un equipo de especialistas experimentados en desarrollo informático e implantación que fortalecen continuamente sus disciplinas adaptándose al cambio y a la evolución de los negocios del sector.
© 2024. Todos los derechos reservados. Adeq Systems.